Diseño de interiores: la Ventana de Marcel Benedito

Diseño de interiores: la Ventana de Marcel Benedito
Casa Sardinera de Ramón Esteve. Foto: Mariella Apolonio

lunes, 17 de marzo de 2014

En casa del arquitecto ¿cuchillo de palo?

En casa del herrero ¿el cuchillo siempre es de palo? No necesariamente… Este mes publicamos en la revista CASAVIVA un proyecto que tiene la particularidad de estar diseñado por el mismo profesional que lo utiliza: una vivienda singular con soluciones constructivas inéditas que, lógicamente, acaban influyendo en el aspecto del interior de la casa y condicionando su uso. Nuevos materiales, esquemas inéditos, espacios diferentes.
 
Estas imágenes son cortesía de la revista Casa Viva. Fotos: Albert Font
 
Las casas de los arquitectos e interioristas siempre han ocupado un capítulo aparte en la historia de la arquitectura moderna, ya que se pueden considerar pistas de experimentación del profesional que sólo tiene que discutir consigo mismo (y con su pareja, pero esa es otra historia) los detalles de su futuro hogar. Una ocasión como pocas para innovar, aportar nuevas soluciones y romper los escleróticos moldes de la arquitectura residencial.
 

 
En este sentido llama la atención, en primer lugar, la omnipresente preocupación por el autoabastecimiento de energía que observa este proyecto y que demuestra que este tema se halla en la cartera de los arquitectos desde las primeras decisiones. Nos tranquiliza saber que la sostenibilidad de las casas ocupa un lugar de honor en la sensibilidad de los nuevos arquitectos. Su responsabilidad de cara al futuro en este tema, así como en cuestiones de urbanismo, es notoria. De su actitud ante el tema residencial puede depender que las constructoras y las inmobiliarias no vuelvan a incurrir en la desidia constructiva que ha caracterizado tradicionalmente el ladrillo en nuestro país.
Si nos fijamos en esta vivienda en concreto podemos concluir que el ladrillo, como elemento constructivo está en crisis y que será sustituido por materiales más ligeros como el panel de aluminio o de madera laminada, que permitirán levantar casas en poco tiempo, en buenas condiciones de uso y con costes inferiores. A ello se le debe sumar el uso de energía geotérmica, de paneles solares y de controladores de accionamiento que permitirán importantes ahorros energéticos. El arquitecto, además, sabe cómo orientar su vivienda para que aproveche al máximo los periodos de insolación en invierno, y las corrientes de aire en verano.
Llama la atención que la madera sea una de las soluciones viables en un planteamiento de futuro de la arquitectura residencial. En esta revista siempre hemos querido adelantarnos a las nuevas tendencias y, durante los dos últimos años, hemos comprobado con asombro cómo se impone la madera como materia táctil en nuestro entorno. Ahora sabemos también que sus propiedades estructurales y su comportamiento técnico la hacen muy aconsejable en construcción.
 
Todos los proyectos son atractivos por un tema u otro y aportan datos de interés, pero los que hacen los propios interioristas y arquitectos son los que más pistas nos ofrecen sobre el futuro. En sus casas, como en los edificios de uso público de vanguardia, se trabaja pensando en décadas, no en años, lo cual nos proporciona una información muy valiosa como prospección. Es un avance de tendencias constructivas que, a la larga, se traducirá en nuevas formas de entender la residencia y su uso por las personas. El futuro ya está aquí.